Autor: ExporkNews
Fecha de publicación: 18/May/2023
Palabras claves: PolÃticas, Clima, EnergÃa, G-20, Gubernamental.
En general, la mayorÃa de los paÃses G-20 han mejorado sus pautas con bajas emisiones de carbono en 2022, como se puede ver en un nuevo informe del BloomberFef Research Group (BNEF). La mayorÃa de las medidas estatales utilizadas como precios de la energÃa tuvieron que aumentar no deberÃan obstaculizar la transición a una economÃa con bajas emisiones de carbono.
Además, la mayorÃa de los paÃses G-20 lanzaron una nueva ayuda para tecnologÃas y sistemas con emisiones de baja carbono el año pasado. Como resultado, 17 paÃses han retenido o mejorado su puntaje en la tercera edición de la PolÃtica G-20 de carbono G-20 del BNEF, un informe anual que evaluó y clasificó a los gobiernos en relación con las directrices con bajas emisiones de carbono.
Juntos, los paÃses G-20 recibieron un valor promedio del 54%, dos puntos más que en la evaluación de 2022. México estaba en el puesto 13 entre los paÃses del G-20 para su polÃtica climática al aumentar su valor general en un 2 por ciento y lograr una evaluación del 46 por ciento. Sin embargo, esta no es razón para tomar un descanso: ningún paÃs G-20 tiene suficiente polÃtica de carbono para lograr los objetivos del Acuerdo de ParÃs.
El indicador analiza cómo los paÃses G-20 usan las pautas que se discuten en siete sectores: energÃa, transporte, transporte, construcción, industria, agricultura, ahorro circulatorio y combustible y cautivación, uso y almacenamiento de carbono. Los paÃses G-20 representan alrededor del 80% de las emisiones de los gases de la Casa Mundial.
En general, los paÃses industrializados lograron un mejor valor promedio en sus directrices con emisiones bajas de carbono: los paÃses G-20 que pertenecÃan a la OCDE. Además, el grupo de paÃses que no pertenecen a la OCDE incluye grandes paÃses emergentes con una huella rápida de CO2. Muchos gobiernos han dado prioridad a la descarbonización de sus energÃa eléctrica. Como resultado, el G-20 recibió un promedio de 61% para este sector en 2023, 1.3 puntos por encima del informe de 2022. El competidor más cercano, el transporte, recibió un promedio de 54%.
Los lÃderes polÃticos del G-20 prestan más atención a los sectores más difÃciles para ser librados. Como resultado, el valor promedio de los edificios, la economÃa circular y la industria aumentó entre 1.7 y 2.7 puntos porcentuales en comparación con el año anterior. Sin embargo, se requiere más apoyo polÃtico, especialmente de energÃa y transporte, ya que estos sectores logran un promedio del 47%.
En particular, los polÃticos podrÃan aplicar incentivos financieros concretos para hidrógeno limpio, CCU (captura y almacenamiento de carbono) y prácticas agrÃcolas sostenibles, estándares de eficiencia energética más estrictos para edificios y estándares de residuos, asà como el precio del carbono. TodavÃa no se ha colado en el top 4 porque los paÃses europeos han utilizado más "polÃtica de manos duras", como los precios del carbono, la prohibición de la energÃa del carbón y los estrictos estándares de eficiencia energética. El indicador de directriz BNEF califica a los miembros del G-20 durante el 100%, dependiendo del volumen de ayuda pública para reducir el SHG, el cambio por el terreno.